jueves, 31 de diciembre de 2015

Sobre continuar, un nuevo año, memorias y cosas brillantes.

Well I woke up to the sound of silence the cars
Were cutting like knives in a fist fight
And I found you with a bottle of wine
Your head in the curtains and heart like the fourth of July
You swore and said we are not
We are not shining stars
This I know
I never said we are
Though I've never been through hell like that
I've closed enough windows to know you can never look back
If you're lost and alone
Or you're sinking like a stone
Carry on
May your past be the sound of your feet upon the ground
Carry on


Woah my head is on fire
But my legs are fine
After all they are mine
Lay your clothes down on the floor
Close the door
Hold the phone
Show me how
No one's ever gonna stop us now

'Cause we are
We are shining stars
We are invincible
We are who we are
On our darkest day
When we're miles away
So we'll come, we will find our way home

No one's ever gonna stop us now.

Carry on - Fun. 


Y aquí estamos de nuevo, otro año, otro comienzo, otro final. Este año fue de muchos cambios, nueva escuela, nuevos compañeros, despedidas, adaptarse de nuevo, dejar de ver a esas personas y acercarse más y más al mundo real. Y no sé como sentirme, porque éste año lo comenzaré sin algunas personas, personas que extraño y que me duele verla y saber que ha pasado por mucho y que quisiera que esas personas regresaran y que no tuvieran tantos problemas.

Hay algo que he estado pensando, mi abuela se fue pero nació su bisnieta y es la niña más bonita que puedes ver. Y en los últimos momentos que la vio, la tuvo al lado. Y la extraño, puta madre. Y mi padre nunca ha sido de mostrar sus sentimientos pero ese día fue horrible. Porque ella era una mujer muy fuerte...ellas siempre son muy fuertes y quisiera que fueran eternos.
También nació el hijo de mi primo, que es el niño más tranquilo y sé que mi tía hubiera querido que esperaran más, todo niño es una bendición.

Cuando salí de secundaria, no sentí tristeza, no sentí nada porque aunque haya dicho que tuve momentos buenos, ese lugar nunca fue importante para mí, ese lugar es...solo otro más. Entrar a preparatoria fue volver a empezar, pero es poder empezar de cero, poder explotar tu nuevo ser, el verdadero. Aunque los chicos sean muy diferentes, porque vienen de otros lugares y no es lo mismo, nunca va a volver a ser lo mismo y nunca creí que mis padres tendrían razón, nunca creí que extrañaría esos pasillos y a esos chicos, nunca creí que esos y estos serían los mejores años de mi vida.

Conocí a chicos que ahora son importantes para mí, los conocí y he empezado a ser un poco más yo y eso está bien, porque no debes fingir ser alguien más, porque es cansado no ser tú. Me siento un poco más feliz, no como el año pasado, nada comparado con ese año. Porque comencé a hacer algo, porque los pensamientos ya no son tan malos, porque las caídas ya no me hunden tanto, porque ya no voy a ese lugar del que tanto hablaba Charlie, porque ahora parece que me importa menos, porque no debería de importarme en lo más mínimo. Y eso está bien.

Este mes...ha sido el mejor mes. Esa persona volvió y trajo de nuevo esos sentimientos pero al final, todos queremos amor, todos queremos despertarnos emocionados por soñar con esa persona e imaginarnos con ella, pero siempre tienes que quererte más a ti mismo, ¿sabes? Eso siempre debes tenerlo en cuenta. Este mes, la he pasado entre amigos, así no pienso tanto, así no gasto el tiempo pensando en ilusiones y es algo bueno, porque son cosas que vas a recordar, cosas que no van a dejar que te hundas.

Este año me animé a decir en voz alta te quiero/te amo sin tener miedo, aunque aún me resulte difícil vocalizarlo, aunque aún tenga mis muros y mis bordes filosos. Nunca se sabe cuando volverás a ver a esa persona, nunca debes dar por sentado que lo saben. Tenemos que valorar los pequeños momentos, los pequeños detalles, hasta el pequeño dibujo que alguien hizo en una servilleta mientras hablaban o simplemente pasaban el tiempo.

Mucha gente de mi vida cambio, y aunque perdoné todo lo que hizo, el dolor sigue ahí y ya no es lo mismo y todos lo saben, todos lo notan. Le amo, pero lo cambio todo. Y no puedo dejar de extrañar como era antes.

Nunca he hecho propósitos de año nuevo, nunca los cumplo y no sé, prefiero no planear nada y pasarla bien, porque todos lo hacen y es algo que me parece muy gastado.
Solo céntrate en disfrutar, mira el cielo y piensa, pero míralo de verdad, no solo voltees hacia arriba y digas "ah, está nublado/soleado", encuentra formas en la nubes, mira los diferentes tonos que hay en él, míralo. Pasa tiempo con tus amigos, invítalos a tu casa y jueguen jenga, canten esas canciones que les encantan o que les hacen llorar, canten a gritos, bailen aunque les parezca ridículo, regresen afónicos a casa y con los pies adoloridos. Pasa tiempo con tu familia, en serio, aunque a veces parece que no dejan de joder, es familia, pero recuerda que no toda la familia es de sangre. Sal de viaje, toma la carretera y deja que el viento te despeine, mira por la ventana y encuentra la belleza en todo, pasea por las calles de los pequeños pueblos mágicos. Quierete a ti mismo, porque vas a vivir contigo toda la vida.

Solo disfruta, los días malos solo duran 24 horas, piensa que las cosas irán bien y aún cuando no sea así, pronto se arreglarán.

No dejes que esos idiotas ganen, no lo merecen, no dejes que te hundan solo porque ellos están hundidos hasta el cuello. Y claro que las palabras hieren, pero no les creas, no eres nada de eso, ni de coña les creas. Y brinda, brinda por ti, yo lo haré, brindaré por todo lo que hice y lo que haré, por los que se fueron y por los que llegaron, brindaré por los demonios que aún tenemos pero que no dejaremos que ganen, por las batallas ganadas y por las que ganaremos, brindaré por los sueños, brindaré por ese "algún día", pero sobretodo, por ti.

Vive por ti y para ti. Todos tenemos miedos y cosas oscuras, pero siempre los superaremos, porque somos más grandes y brillantes que ellos. Y ríe, ríete fuerte, tan fuerte que el estómago te duela y que todo lo malo desaparezca, ríe que la tristeza no se cura con más tristeza, ríe para que no duela nada.

"...La vida es espectacular. Hay que olvidar las cosas oscuras. Dar un trago y dejar que el tiempo se las lleve a donde sea que el tiempo se lleve todo." 
- Sutter, 
The Spectacular Now, Tim Tharp.

12, 11, 10, 9, 8, 7, 6, 5, 4, 3, 2, 1. Feliz Año Nuevo. 

This is the new year
A new begining
You made a promise
You are the brightest
We are the voices
This is the new year
We are the voices
This is the new year

This Is The New Year - Glee 
(No puede resistirme.)

miércoles, 30 de diciembre de 2015

10.

No sé que estás haciendo, no sé porque dices que nunca has querido lastimarme pero lo haces y no sé como es que mis demás amigos saben más de este tema que yo, no sé porque estás preguntando si seríamos bonita pareja, no sé, carajo, no sé.

Porque ellos vienen y parece que están de tu lado y lo hacen ver como si tú fueras una romántica haciendo todo por mí, pero yo no veo nada. Yo no veo nada viniendo de ti y estoy mal porque ella viene y me cuenta eso que estás haciendo y al día siguiente despierto sintiéndome bien después de dormirme pensando en ti y no es justo, joder.

I me ha dicho que no vales la pena, que merezco algo mejor y le creo, pero lo peor es que...una parte de mi sigue queriéndote a ti. Será por la costumbre, será porque nunca cerramos ésto.

Esa noche quise dar un cierre, quise aclarar las cosas y me dijiste que estabas confundida y ahí estoy yo, como idiota dándote consejos y acabando igual que antes.

Quiero que dejes todo, quiero que me digas de una vez que solo es porque quieres olvidarla a ella, quiero que me hagas llorar para poder odiarte y cortar toda relación y que todos dejen de ponerse de tu lado. Quiero que me demuestres a mí lo que estás haciendo y no a los demás, no quiero que te ganes a los demás, más que a mí.

Estamos haciendo todo mal. Supongo que estamos desesperados por amor.

lunes, 21 de diciembre de 2015

4 am.

Y han sido días de llegar a casa a las 4 am, afónica y con una sonrisa en cara.
Con nuevos recuerdos y los miedos olvidados por un rato.
Rostros, luces difuminadas y vasos en manos.
Los pies adoloridos y restos de risas en mis labios.
Cosas que antes evitaría hacer porque ni yo misma quería verme.
Y es divertido. Es divertido soltarse un rato.
Olvidarte de todo y sonreír y llegar a casa y escribir cosas en un blog y ver borroso.
Vivir y disfrutarlo.



domingo, 20 de diciembre de 2015

Vino y bombones.

Vamos, me dijo riendo y tomando mi mano mientras nos alejábamos de los demás. Llegamos al baño y cerro la puerta, me recosté contra la pared apoyando mi cabeza en ella. Estaba frente a mí, despeinada, riendo a carcajadas, siendo libre.

Se sostuvo del lavamanos y miro al espejo, yo estaba recuperando el aire que me robo la risa y me tomo unos minutos darme cuenta que se había quedado callada, viendo su reflejo. Pero no se estaba viendo a ella, me estaba viendo a mí.

Dejo caer sus manos a los lados y siguió viéndome con sus ojos delineados de negro y la pupila dilatada. Se dio la vuelta y se acercó a mí. Yo respiraba quedito, queriendo ser una con la pared y al mismo tiempo mis manos picaban por tocar su piel.

Cerró la distancia entre nosotras, el baño estaba en silencio y el foco amarillo se balanceaba sobre nuestras cabezas. Su nariz rozo la mía y el corazón me latía en los oídos. Me robó el aire. Me robó los latidos. Me robó los sentidos. Me robó todo.

Sabía a vino, sabía a bombones y a noches eternas. Sabía a todo eso que había extrañado desde febrero y que me lo había arrebatado. Su cuerpo presionaba el mío contra la pared y sus brazos me rodeaban y sentía que podía hacer todo. Sentía que podía contra todos y todo. 

Tomamos aire y apoyo su frente contra la mía, quería abrazarla por siempre o por lo menos una eternidad. Quería llorar por todo. Quería quedarme ahí en nuestro pequeño rincón. Quería recuperar el tiempo perdido y gritar.

Estaba tan herida pero a la vez me curaba, le odiaba por haberse ido y haber vuelto y por lastimarme, por tenerme al borde del abismo durante 10 meses, por volver cuando ya no dolía tanto.

Sentía que me sofocaba tenerla cerca pero no quería soltarla.
Solté su cintura y sentí que me rendía. Me sentía demasiado lastimada y sé que a ella no le importaba.
Porque la magia de esa noche se acabaría al salir el sol o al salir de ese baño.
Y no era justo, joder, no lo era. Había pasado todo el maldito año tratando de superar esto y había vuelto a caer por sus palabras bonitas y por la noche.

Una herida se me escapó y ella la vio caer, me sentí tan tonta.
Se me había acabado el polvo de hada y sus trucos ya no estaban surtiendo el mismo efecto.
Quería que dijera lo siento, como aquella noche de mi cumpleaños. Quería que lo dijera de verdad, que lo sintiera. Pero no lo hizo. Dejo de rodearme con sus brazos y retrocedió varios pasos.

Me quede recostada contra la pared, sin fuerzas, quería que Irma o Liz vinieran a rescatarme, que pelearan la batalla por mí. Busque a tientas la manija de la puerta y salí de ahí. El viento helado me golpeo y la música sonaba fuerte.

Irma llegó hasta donde estaba y me tomo de la mano, me llevó con los chicos y comenzó a bailar a mi al rededor como loca. Me reí fuerte, me reí hasta que el estómago me dolió, me reí tan fuerte que no me importó nada, ni las heridas secas en mis mejillas ni a quien había dejado atrás.

Estarás bien, mereces más que eso, me dijo al oído y le creí.

Estaré bien sin ti, estarás bien sin mí.
Estaré bien, estaré bien.

lunes, 30 de noviembre de 2015

Otro otoño más.

Son las 2 am.
Mi hermana duerme junto a mí.
Las únicas luces en la habitación son las luces de Navidad en las que estoy envuelta,
de alguna manera siento que impiden que me desmorone.
Y las ojeras me pesan. Y el corazón más.

Dieron las doces, mientras apoyaba la cabeza en el hombro de mi madre.
He conseguido otro otoño.
Lo conseguí y es curioso como siempre de niña, pensaba que tenía mucho tiempo para llegar a esta edad y que todos mis desastres se resolverían. Y algunos siguen aquí. Siendo más desastrosos que antes.

No estoy enojada, estoy herida. Estoy tan jodidamente herida. Y tal vez sea una tontería pero duele, carajo, duele como una puta estaca al corazón.
Ellos...me dejaron. Y me sentí tan abandonada, tan...humillada(?), tan...tan sola.
Esperaba el día de ayer con emoción porque nos reuniríamos todos para divertirnos y de todos ellos, solo 4 estuvieron. Todos esos chicos con los que había pasado tantas cosas, mi mejor amiga, mis compañeros de kinder, ´primaria, secundaria...no estaban.
Y siento horrible porque yo siempre trato de ir a todos sus eventos, a todos sus cumpleaños, trato de acompañarlos, de hacerlos sentir especiales, bien.
Y solo les dije: está bien.
Pero no estoy bien, carajo. No estoy bien. Me duele, puta madre. Me duele.
Y mi madre se dio cuenta que me encerré en el baño unos minutos y vino y me abrazó.Y solo quería quedarme ahí por siempre.
Me dijo que las personas no siempre serán y harán lo que yo creo (eso lo tengo tan claro) y que la vida se encargaría de enseñarme quién sí, quién no y quién nunca.
Tal vez mi problema es que doy demasiado y espero demasiado a cambio. Y así es como acabo.

Me sequé las lágrimas, salí y me dije que no dejaría que eso me lo arruinara, quería demostrarles que me importaban una mierda, que me iba a divertir sin ellos. Y es que no todo se cura con un puta te queremos. Lo siento, siento ser así. Pero esto no se cura con palabras.

No tengo mi viento de madrugada. No tengo mi eternidad. No tengo mi paz.
Ghost Stories Live se reproduce en mis auriculares y solo quiero apretarme más entre las luces.
Es parte de crecer. Una mierda.
Quiero regresar a este día pero del año pasado. Quiero esos sentimientos de vuelta. Quiero...
No guardo reconcor, pero no deja de doler.
Está bien, está bien. Todo está bien.
Está bien.

Got a tattoo that said "2gether thru life"
Carved in your name with my pocket knife
And you wonder when you wake up
Will it be alright?
Oh oh oh oh oh oh
Feels like there's something broken inside.

miércoles, 25 de noviembre de 2015

25/11/15.

Diste tu último aliento,
te dieron tu último beso,
casi puedo escucharla
puedo escucharla
y te dice "mi niño"
y tus hijas a tu lado
y tu sobrino, mi padre

La vida te puso una traba enorme,
pero ella siguió a tu lado
y siempre sonreía
y siempre era alegre
y tus hijas, tus hijas
con la risa tan contagiosa
como si no les doliera nada

Y mi padre,
jugando contigo
riendo como niño pequeño

Y te has ido, te has ido.
Estás ahí en algún lugar, 
ya no sufriendo,
ya sin esa enorme traba

Estás con ella, 
estás con todos ellos
diles que los extrañamos
que les seguimos amando y recordando

Seguro una de ellas te está haciendo reír
y estás riendo tanto que te duele el estómago
y estás bien
ya no hay miedo
pero sigue habiendo amor.

Siempre estará su amor por ti.

Descansa en paz, ahora estás bien...Estás bien. Te quiero.

sábado, 21 de noviembre de 2015

De carreteras y respirar la eternidad.

Estábamos persiguiéndolo.
Tomamos la carretera desde las 9 de la mañana. Llevábamos pocas cosas, mochilas, barras de fresa y botellas de agua. Aaron conducía la camioneta, Alex iba en el asiento del copiloto con la ventana abierta, Sofía y yo en los asientos traseros. La carretera se extendía ante nosotros solitaria y el Sol era fuerte en mi piel y la brisa alborotaba el cabello de Alex.
En el radio sonaba el disco de The Baseballs y Aaron tarareaba mientras conducía, Alex contaba el último chisme del que se había enterado a Sofía y yo simplemente miraba por la ventana.

El paisaje era calmante, montañas, palmeras, el mar, el cielo tan azul que te hacía sentir libre.
Llegó un momento en el que la voz de Alex y Aaron me adormecieron y cuando desperté, me encontré mirando el mar. El auto continuaba avanzando, pero podía ver el mar a la distancia, era de un color azul pálido, ese color que toma cuando el día esta nublado. Continué mirándolo hasta que ya no había más.

Comenzamos a llegar a la ciudad, comenzaron a aparecer las tiendas, los hoteles, los departamentos, las personas caminando por las calles, los autos...
Pasamos todo el día en la ciudad, pasamos por las tiendas, con Alex cuidándonos a Sofía y a mí, como si fuéramos su hijas, Aaron riéndose de las tonterías que hacíamos, Sofía muriendo por un oso de peluche tres metros más grande que nosotros, bailando, visitando museos, caminando por las calles, arrastrando a Alex fuera de las tiendas de ropa y deteniendo a Aaron de llevarse todos los CDs del lugar.

Al momento de dejar la ciudad, alrededor de las 5 de la tarde, Aaron sugirió que pasaramos por Todos Santos, un pequeño pueblo mágico. Dejábamos la ciudad y Aaron quiso llegar a una gasolinera. Ellos entraron a la pequeña tienda, mientras yo me quedaba afuera, en una pequeña mesa con bancas. El viento corría, la carretera estaba sola y solo había 2 personas hablando junto a las máquinas de gasolina. Me recosté contra la pared y balancee mis pies, mirando hacia la carretera.
Sentía que tenía todo el tiempo del mundo, sentí la libertad llenándome los pulmones, el cielo no era del color azul puro como al principio del viaje, ahora había más nubes pero sin llegar a estar nublado y con amenaza de lluvia. Quería que días así fueran posibles de guardar para siempre de alguna forma física. Mire por la ventana de la tienda y los vi a los tres, riendo, abrazándose y empujándose por los pasillos, sintiéndose más jóvenes de lo que nunca fueron.

Retomamos la carretera, con el sol oculto entre las nubles, apenas alcanzando a ver el silver lining. Tomó un tiempo llegar al pequeño pueblo y fue como ser transportada a otro tiempo, con las calles empedradas y las construcciones hogareñas y rústicas. Llegamos a un pequeño restaurante, el lugar estaba solo y era muy acogedor. Comimos entre risas y haciendo tonterías. Al irnos, Alex dijo que pasáramos por el Hotel California. Nos sentamos afuera y tomamos fotos, cantamos un poco la canción sintiéndonos felices de estar viviendo ésto. Era domingo, el pueblo estaba solo y todo era infinito.

Los americanos nos sonreían, la gente pasaba a nuestro lado y nos saludaba sin siquiera habernos visto alguna vez en su vida (es una costumbre en éstos pueblos tan pequeños).
Llego el tiempo de ir a casa, volvimos a subirnos al auto y retomamos nuestro camino, en el radio sonaban mis canciones favoritas de Coldplay y Alex las cantaba junto conmigo. El cielo comenzó a oscurecerse cada vez más, la luz entre las nubes era cada vez menos, el viento era más frío y la carretera era iluminada por los pocos autos que regresaban junto a nosotros. Sofía estaba dormitando junto a mí, con la capucha del suéter puesta, Aaron jugaba con la radio y Alex contaba historias. Miré por la ventana de atrás de la camioneta, miré por la ventana de Sofía y miré por el parabrisas. Sentía algo parecido a lo que sentía en mi "época feliz" , algo parecido a la felicidad que me trae el invierno, algo parecido a sentirme infinita. 

El paisaje estaba pintado de un color morado oscuro, ese tipo de color que solo se ve en las imágenes de carreteras en tumblr, ese color frío que te hace sentir eterno, como el viento que entra por tu ventana en invierno a las 3 am mientras escuchas Ghost Stories (Live) o a Adele en el Royal Albert Hall y las únicas luces en la habitación son las luces de Navidad. 

Tenía unas pequeñas ganas de llorar, tenía ganas de respirar hondo y llenarme el cuerpo con ese sentimiento, retenerlo en mi pecho para siempre.

Son ese tipo de cosas que nunca olvidas, son ese tipo de sentimientos que te pasas persiguiendo toda la vida.
Quisiera que lo vivieran, quisiera que miraran a su alrededor y se sintieran eternos, libres y brillantes.
Así es como deberías de sentirte toda la vida. 

sábado, 14 de noviembre de 2015

Pequeñas cosas.

Estoy segura de que todos las tienen. Estoy segura de que todos las hacen. Todos tienen esas pequeñas cosas que los hacen saber que están bien. Que están mejorando. Pequeñas cosas que te hacen sentir bien, que te dan ilusiones, por pequeñas y tontas que parezcan.

Despertarte emocionada porque algo bueno puede pasar, escuchar Raise Your Glass mientras te bañas, verte al espejo y pensar "estoy avanzando", aplicarte labial y decir "me veo muy bonita hoy", acomodarte el cabello, ponerte el perfume que más te gusta, pintarte las uñas, imaginarte cosas buenas, sonreír al llegar al salón, probarte ropa y creer que te ves mejor que nunca, salir a la calle a divertirte sin importarte las demás personas.

No puedo hacer eso. No puedo despertarme emocionada, no puedo escuchar esa canción por la mañana, no puedo pensar "estoy avanzando", no puedo ponerme labial y sentirme bonita, no puedo acomodarme el cabello ni probarme ropa y lograr sentirme como las demás chicas. Me pongo el perfume que más me gusta porque me hace regresar a un lugar seguro pero no puedo pintarme las uñas (lo cuál pienso que es una idiotez mía) porque hacerlo significa que estoy comenzando a sentirme bien. Y prefiero no hacerlo a después estrellarme. Prefiero huir a intentarlo, enfrentarlo.
Y ese es mi problema.

Es como que tengo ganas de ver los esmaltes y todos son femeninos, bonitos. Cuando me pongo esmalte es...sentirme bonita. Bien. Normal. Es una de mis pequeñas cosas.
Pero después verme al espejo, de probarme ropa, de ver que mi "avance" en realidad es una basura, quiero llegar a casa y quitarme el esmalte. Quitármelo. Morderme las uñas hasta la cutícula. Quitarme el labial con el dorso de la mano y soltarme el cabello.

Quitarme mis pequeñas cosas.

Y antes trabaje estas cosas con un profesional, era parte del proceso, era parte de avanzar, de irme sintiendo bien porque estaba en camino a ser otra persona, alguien mejor. Alguien con confianza, supongo.
Es fácil dejarse llevar por los cumplidos, es demasiado fácil. Siento que caigo en una confianza falsa. Y me digo a mí misma "acéptalos, pruebalos, pero solo será por unos instantes".

Quiero, necesito hacer esas pequeñas cosas. Tal vez en vacaciones de invierno pueda volver a sentirme bien. Tal vez.
Solo quedan 34 días.
Solo 34. Joder.

miércoles, 11 de noviembre de 2015

De vidas, focos y pinturas.

Hace unos días, mi profesor de pintura nos pidió que escribiéramos porque nuestra vida se parece a un foco, alguien escribió que su vida se parece a un foco porque nunca sabes cuando vas a apagarte y tienes que brillar con mucha fuerza mientras puedas, así como la vida, nunca sabes cuando va a acabarse y tienes que vivirla mientras la tengas. Otros escribieron que cuando el foco se rompe, sus lados filosos pueden cortar, que son frágiles aunque no lo parezcan.

Escribí que la vida se parece a un foco porque hay personas que quieren apagar las luces más brillantes, que los toman y los tiran para hacerlos pedazos sin importarles nada; que también hay personas que sin saberlo apagan tu luz, y ellos no saben que tu luz es tan tenue que sientes que no existe y cuando ellos la apagan solo queda la oscuridad total.
Que está bien apagarse por un tiempo y entonces, encenderte y brillar como nunca antes. Que algún día la luz va a irse pero sabremos que no fue porque el foco se "fundió" de la nada. Que habrá personas en nuestra vida que querrán apagarnos pero habrá otras que nos ayudarán a seguir brillando y esas son las que tenemos que tomar en cuenta.

También nos dijo "Si fueras una pintura, ¿qué color serías?" y alguien por ahí escribió que sería el color blanco, porque al ser un color base puede mezclarse con todos los colores y crear un nuevo color, un nuevo tono; otros escogieron el color negro porque les transmite tranquilidad. un amigo escogió el amarillo porque le recuerda al Sol y a la felicidad.

Escogí el color azul, porque el cielo y el mar son de ese color y ambos parecen que no tienen final, son eternos. Y creo que así es como deberíamos sentirnos.

Eternos y brillantes.

domingo, 18 de octubre de 2015

Domingo de Octubre.

Y es domingo y es Octubre, apenas siento una pizca de aire frío pero es lo suficiente para encontrarme por casualidad con viejas cartas y libretas llenas de garabatos de personas que quiero.
2012 fue un año importante. 2012 fue el año. 2012 siempre va a dolerme tanto en el alma.

Abrí las cartas y me reí, me reí fuerte hasta soltar las lágrimas. Y entonces vienen Diana y Kate con más cartas que les he enviado y nos reímos aún más. Y regresan las ganas de volver a otros tiempos. A los que fueron los mejores.

Y son tantos recuerdos y momentos y se me hace difícil ya no verlos más a diario, ya no verlos al mirar por la ventana, al receso, a la salida de la escuela, ya no verlos en lo absoluto.

Y me acuerdo de las risas, de las idioteces que decía y de las que ellos decían, del cumpleaños de Diana y Kate y yo corriendo en la calle lanzándonos espuma y serpentinas. Me acuerdo de correr con Kate en los pasillos de la escuela y Samuel regañándonos. Cuando Diana dijo que nos quitáramos a la cuenta de tres pero ella se quito a la de dos y Omar me hizo caer. Cuando Luis Angel me caía mal y siempre nos decíamos cosas pero al final nos reíamos.
Cuando Omar cerró tan fuerte la puerta del aula que nos dejo encerradas dentro. En mi cumpleaños cuando acabamos todos cubiertos de glaseado de los cupcakes y con pedazos de pizza en todas partes y al final de la noche, acostados fuera de mi casa con pulseras de neón.
Las cartas que nos obligaban a mandar a chicos de otros salones y solo mandábamos garabatos los unos a los otros.

Me acuerdo de las ganas de cambiarme de grupo y estar con ellos (al final de todo, nunca lo hice).

Y extraño todo eso, los extraño a ellos y solo quiero volver.
Quiero tenerlos de vuelta a todos.
 Y sé que los veré en dos horas, veré solo algunos de ellos y sé que al acabar la noche, se irán con el pedazo que tienen de mí y yo me iré a casa con los pedazos que tengo de ellos.
Quiero llorar y volver.
Es Octubre y siempre ha significado nostalgia.
Puta madre.



domingo, 20 de septiembre de 2015

Cuando toda mi vida sea domingo.

"Si algún día me suicido será en domingo. Es el día más desalentador, el más insulso.  Quisiera quedarme en cama hasta tarde, por lo menos hasta las nueve o las diez, pero a las seis y media me despierto solo y ya no puedo pegar los ojos. A veces pienso que haré cuando toda mi vida sea domingo." 

-La Tregua, Benedetti.


Siento que todos mis días son domingo. Y no sé como seguir con eso.

lunes, 14 de septiembre de 2015

Miradas.

Las odio, ¿saben? Porque siento que me juzgan, casi puedo jurarles que me están juzgando. Cuando le hablo a alguien y volteo a mi alrededor y me están mirando. Y aunque saben que los veo, no apartan la mirada.
Cuando me siento un poquito bien en esas horas, que bajo la guardia un poco, miro alrededor y me miran. O suben el teléfono y prácticamente me lo pone en la cara. Con la cámara apuntando hacia a mí.
No quiero pensar mal, ¿vale?
Pero no puedo evitar sentir sus miradas. No puedo evitar querer desaparecer porque así lo siento. Porque me miran y de repente se ríen. Porque están hablando y me miran.
Y me duele, joder, no saben cuánto duele. Porque aunque no sé que piensan, no sé de que hablan o se ríen, con el solo mirarme mientras lo hacen, mi mente solo comienza a hacerlo.
Pienso en todo, pienso en cómo me verán, si me me ven peor de lo que yo me veo.

Y me dicen que sea fuerte, que soy más fuerte que ellos, que se creen superiores. Que van a hacer algo si ellos siguen así.

...Lamentablemente, no siempre pueden pelear mis batallas, no cuando la mayor parte del tiempo son contra mí misma.


27 días.

No sé, ¿vale?
No sé, ya no sé.

Han sido días difíciles, me siguen preguntando cómo fue mi día y sigo diciendo que bien, siempre ha sido bien.
Sabemos que es mentira, sabemos que es la mentira más usada en todo el mundo.
Todos los días son de estar alerta, sin bajar la guardia, tratando de soportar el día. Porque últimamente es más fácil despertarme desanimada y odiando todo que despertarme animada y salir de la escuela solo queriendo llegar a encerrarme en casa.
Es más fácil vivir viendo todo a través de una bruma.
Viendo pero en realidad no, sintiendo y siendo pero no estar ahí.
Es más fácil.
Y sé que la vida no debería ser así, sé que está mal y sé que es como volver a hace dos años atrás. Es como volver a escribir todas esas entradas que tanto odio aquí.
Siento que he vuelto a tener 7 años y yo odiaba la persona que era a los 7 años, odio a la persona que era a hace dos y no sé cómo sentirme respecto a la persona que soy ahora.

Los días se basan en despertar tratando de no sentirme bien, para después no darme un golpe contra el suelo. Llegar a la escuela, sentarme y abrazar mi mochila durante las clases tratando de esconderme. Contar los minutos para que la clase acabe, tratar de estar siempre con alguien que conozca, llegar a casa, tratar de no pensar en todas esas cosas y volver a empezar.

Los fines de semana son los únicos días en los que puedo permitirme tener ganas de despertar. Los únicos días en los que realmente me siento yo. Es como volver a emocionarme por ver Glee, como volver a sentir ganas de escribir por el simple placer de hacerlo, de tener esperanza de que voy a hacer todo lo que sueño.

Quedan 95 días y podré sentirme bien por dos meses.
Joder.

martes, 1 de septiembre de 2015

Missing everything.

No he estado aquí por casi un mes, es raro, pero estas semanas he estado tan ocupada y siento que mi mundo se ha puesto de cabeza.
Entré a una nueva escuela, nos pidieron que entráramos una semana antes porque éramos de nuevo ingreso, eso fue hace...dos semanas y tres días. Y solo les digo que puse un pie fuera del auto ese día y ya quería irme a casa. No quería estar ahí. Quería regresar a mi lugar seguro en mi cama bajo mi cobija.
La primera semana fue solitaria, mis demás compañeros socializaban entre ellos y ya tenían visto con quien iban a pasarla bien por el resto del semestre, quería hablarles, quería reírme con ellos pero me volví demasiado tímida. Me pidieron que me presentara el segundo día y sentía mi cara ardiendo, miraba hacia abajo y tenía la mochila abrazada con fuerza contra el cuerpo. Después, el maestro de pintura me eligió para pasarme al enfrente en una actividad y solo quería cavar un pozo y enterrarme ahí por el resto de mi vida.
Siento que volví a ser como era a los 7 años.
Y es horrible.
La mayoría de mis amigos quedaron en el turno de la tarde, solo 7 de ellos quedaron por la mañana y en diferentes grupos. Otros ni siquiera quedaron. Las escuelas tienen mucha demanda y poco espacio.

Han sido dos semanas y ya quiero que se acaben los tres años que me quedan. Siento que no quiero hacer nada, siento cansancio, cansancio emocional. No quiero ir, no quiero ver a nadie, no quiero ver a los maestros, no quiero ir a ese lugar.

...Cuando estaba en mi primer año en secundaria, tuve algunos problemas con unos compañeros y mi madre me insistía en si me cambiaba de grupo, le dije que sí, al final. La psicóloga habló con los chicos que me molestaban, con mi madre, el director y conmigo. El director prácticamente solo terminó diciendo que tal vez tenía un problema de adaptación, que no era normal, que tenía que hablar eso con alguien. Un año después, volví a tener problemas con los mismos chicos y me quedé en el mismo grupo. Y ahora mi madre piensa que tal vez él tenía razón. Que tal vez debería hablar de eso con alguien.

Me dice que ignore la ansiedad que volvió a mí, que tengo que buscar el lado positivo, que aguante.

Vuelvo a contar los días para que la semana acabe, cuento los minutos para que termine la clase, el miedo de estar sola en el receso y es entonces cuando comienzo a sentir que veo a través de una bruma, como si estuviera soñando despierta. Lo odio.

Hace tres días volví a ver a todos esos chicos que hacen el mundo más ligero y ya los extraño como si hubieran pasado 20 años.

Y está este chico, que esta fuera de mi alcance, que sé que nunca me verá y no quiero volver a sentir eso, no quiero tener que preocuparme por como me ve una persona y sobretodo una persona como él, que es igual a los demás y que trato de evitar. No tengo la fuerza para eso.

Quiero devuelta la familiaridad, la comodidad de no tener que preocuparme al pasar al frente en la pizarra o a revisar, quiero sentarme hasta atrás y reírme de cualquier tontería, quiero hablar con la persona a mi lado o en frente mientras trabajamos y sonreír sin sentir que me estoy esforzando demasiado o que estoy siendo demasiado falsa.

Solo quiero envolverme en los brazos de L y que me diga que todo estará bien, usar sus brazos de cobija y su pecho como almohada.

Solo...supongo que estoy cansada. Han sido muchos cambios y no estaba preparada.
Aún no lo estoy, el mundo sigue girando aunque esté acostada en el suelo pidiendo un descanso, carajo.

viernes, 7 de agosto de 2015

5:30 am

Te soñé, por segunda vez, te vi bailando. 
Dando piruetas como niña, riendo y dejando que el viento alborote tu cabello.
Te miraba desde lejos. 
Te veías feliz.
Me subía a un auto y tú te quedabas quieta.
Te mirabas triste, paralizada.
Te acercabas y el auto comenzaba a moverse.
Desde lejos gritabas: "¡No, no, no, no!"
Estirando los brazos hacia el frente, con las manos abiertas.
El auto continuaba avanzando y te hacías cada vez más pequeña.
Solo quería que volvieras a dar vueltas y dejar que el viento mueva tu falda.
Quería escuchar tu risa.
Te miré una vez más.

Desperté.

miércoles, 5 de agosto de 2015

2:40 am son de extrañar.

Papá, mamá, extraño los viejos tiempos.
Los viajes en carretera cuando llovía o después, los pueblos fantasmas o mágicos.
Extraño a mi abuela, aunque su sofá fuera tan cómodo que me durmiera cuando íbamos a su casa. O cuando estábamos en una fiesta en familia y ella siempre tenía la música por dentro y nos contagiaba. 
Extraño cuando Ángel y yo corríamos por el patio de mi nana en verano, lanzándonos agua.
Extraño jugar al Mario Kart o Zelda con Tito y Ángel.
Extraño cuando mi tía estaba en casa cada que el trabajo la dejaba y siempre nos hacía reír o pasaba tiempo con la familia.
Extraño que mi tío grite "¡Ya llegué!" en la puerta de mi nana y que Ángel y yo compitamos por ver quien lo abraza primero. (Por las dudas, casi siempre era él, maldito)
Extraño cuando mis muros no lastimaban tanto.
Extraño cuando no sabía que uno de mis tíos fuera tan jodidamente imbécil.
Extraño cuando mis primos (de parte de mi padre) y yo jugábamos juntos.  
Extraño jugar en la calle, con todos los chicos con los que crecí, aunque fueran unos hijos de puta conmigo.
Cuando los atardeceres con el cielo pintado de rosa con un toque de naranja o amarillo mientras regresábamos a casa después de un viaje.
Las canciones de P!nk cantadas a gritos con voces desafinadas con Alex y Ale durante dos horas de regreso a casa.
Los días en la alberca con todos.
Extraño las risas y las historias.
Extraño que las ausencias no duelan.
Extraño que mi tía no tenga tantos problemas con sus hijos.
Extraño que mis primos no tengan tantos problemas y responsabilidades.
Extraño a mi abuela sentada en su sillón. Puta madre, la extraño tanto.
Extraño cuando sentía ese algo que me hacía querer escribir todo el tiempo.
Las noches de invierno en la sala de mi nana, con mi hermana dormida en el sofá de al lado y la casa en silencio.
Los cuentos escritos en aquella computadora, ahora descompuesta y sin esperanza.
Las canciones de Fun por las mañanas antes de ir a la escuela.
Las pláticas incoherentes con todos a mi al rededor cuando tenía taller y siempre llegaba medio dormida.
Las idas a la playa, con toda la familia de mi padre, riendo y contando historias, alentando a todos a divertirse.
Las gotas de lluvia de Julio/Agosto cayendo por el cristal, devuelta a casa y Have You Ever Seen The Rain en el radio.

 [..] cuando amamos con tal intensidad que sentimos la necesidad de crear algo a partir de eso. No exactamente crear, sino actuar en consecuencia. 

Echo de menos todo eso.

2:04

Vale...
Voy a hablar de algo que odio. Algo que estoy volviendo a sentir. Algo de lo que quiero deshacerme.
Siempre es lo mismo, me conozco. Conozco el lugar del que huyo. Conozco el lugar en el que estoy, conozco el acantilado del que mis pies se burlan. Conozco la caída. Puedo describirlo con los ojos cerrados.
Odio los nervios de volver a clases, de entrar a una nueva escuela, de no estar con las personas que hacen un poco más fácil. Odio no tener el mismo turno que ellos. Odio preguntarle a mi madre qué haré si no los veo más y que conteste "mírame a mí, me encontré con una compañera casi 30 años después". Yo no quiero verlos en 30 años. Yo quiero verlos al salir del salón o cuando voltee hacia a un lado. Es parte de crecer, me ha dicho. Pues es una mierda.
Odio probarme uniformes o cualquier tipo de ropa. Odio los espejos y hasta me parece insoportable las personas que me ayudan a buscar de mi talla y cuando salgo diciendo: "no me quedo" queriendo morirme.
 Quiero enterrarme a mil metros bajo tierra. Quiero llorar y ponerme histérica.
Odio bajarme del auto y ver mi reflejo en los espejos de las tiendas, odio estar tan al pendiente de lo que como en el día, odio revisar las calorías que tiene lo que como, aún así es algo pequeño, odio querer morirme si lo que como suma más de 600 calorías. Odio que me guste ropa y que no pueda usarla. Odio mis pensamientos. Odio que mi mente pique por querer arañarme la piel. Por quitarme esto.
No quiero volver a caer tanto como el año pasado. No quiero volver a dormirme en clases ni sentir que no puedo más con mi existencia a la mitad del día. No quiero mirarme cuando me cambio, no quiero sentirme el cuerpo. No quiero volver a mentir. No quiero no querer ir de nuevo nunca a la escuela. No quiero llorar todas las putas tardes. No quiero volver a escuchar esa voz que me decía...
No quiero.
Estoy harta, porque estoy mejorando de alguna manera.
No quiero fallar y sentir que he fracasado una vez más.
No quiero volver a escribir entradas que nunca publicaré porque son demasiado.
No quiero volver ahí.
No voy a volver ahí. 

sábado, 1 de agosto de 2015

¿Por qué escribimos?

-Bueno. Empecemos con una pregunta que en realidad no tiende respuesta.  ¿Por qué escribimos ficción?
[...]
¿Por qué escribo yo?
[...]
Para ser otra persona, pensó Cath.
[...]
Para liberarnos de nosotros mismos.
[...]
Para dejar de existir, pensó Cath.
Para no ser nada ni estar en ninguna parte.
[...]
-¿Por qué escribimos ficción?- repitió la profesora Piper.
Cath miró su cuaderno.
Para desaparecer.
Fangirl,
Rainbow Rowell.

martes, 28 de julio de 2015

Gestos que dañan.

Hablaré de una persona que no vale la pena pero que me llena de rabia.
¿Por qué existe personas así? ¿En serio disfrutan de hacer eso? ¿A caso les falto amor? ¿A caso el dinero no les es suficiente y se sienten vacíos? ¿A caso tienen sentimientos? ¿Cómo duermen por la noche? ¿Cómo viven con el peso en el pecho sabiendo que dañaron a alguien?

Muy bien, hoy paso de nuevo.
Mis padres ya han tenido problemas con esta persona por su actitud despectiva, hizo llorar a mi madre. ¿Quién se cree esa persona? ¿Quién se cree esa mierda de persona para hacer llorar a la mujer que me dio la vida? ¿A caso no sabe que él también vino de una mujer? ¿Siente algo cuando ve a su madre llorar? ¿O a su esposa?

Llega y parece que quiere tumbar la puerta y su actitud de superioridad, siendo despectivo y grosero ¿quiere que lo atienda? ¿En serio? No me jodas, idiota.

El día del velorio de mi abuela, mi madre y yo regresamos a casa, mientras ella alistaba las cosas para volver a irnos, él llego. Mi madre me pidió que le dijera que estaba ocupada porque nos iríamos al entierro, salí, le dije "buenas tardes", contesto amablemente, preguntó por mi madre y le dije que no podría atenderlo porque teníamos que irnos al entierro, él ni siquiera me dejó terminar la oración cuando me hizo una mueca, chasqueo los dientes e hizo un gesto con la mano, como si me estuviera mandando a la mierda.

Me quedé helada, quise llorar, mi abuela acababa de morir horas antes, una de las mujeres más importantes de mi vida y llega esta persona...este intento de persona, dándole la menor importancia.
Mientras se iba, solo atiné a gritarle la clase de persona que era, me importó una mierda si los vecinos o mi madre me escuchaban con semejante vocabulario.

Estaba herida, estaba enojada, más que enojada.

Cerré la puerta, con todas mis fuerzas mientras me aguantaba las lágrimas.
No vale la pena llorar por heridas que causan personas así.
No vale la pena caer en el pozo del que estoy luchando por terminar de salir.
No lo vale.

Es hostigamiento, eso merece demanda y sé que varias personas ya lo han hecho, ¿qué las compañías no supervisan a sus trabajadores? Ah, sí, la vez pasada, vino con su supervisor y mi padre se lo dijo, le dijo todo, mientras él estaba más interesado en su teléfono.

La vida se encarga de darle a cada uno lo que se merece. 
A veces tengo miedo de esas personas.

jueves, 23 de julio de 2015

I'll remember.

I learned to let go of the illusion that we can possess,
I learned to let go,
I travel in stillness.

I'll remember happiness,
I'll remember.
And I'll remember the love that you gave me,
Now that I'm standing on my own,
I'll remember the way that you changed me,
I'll remember.

No, I've never been afraid to cry,
Now I finally have a reason why,
I'll remember,
No, I've never been afraid to cry,
Now I finally have a reason why,
I'll remember


Por esos 12 años.
Por esos 8 años.
Por esos tres años.
Y por esos años más.
 Gracias, chicos.

02:21 am.

-Sky, ¿cuál fue tu intención?
Me miró por un momento, indeciso.
-Si te cuento la mía, ¿me dirás la tuya?
Acepté.
-De acuerdo. Mi deseo fue volver a experimentar el sentimiento que tuve a los once años cuando mi padre me llevó por primera vez a un concierto, el de Los Stones. Aún no sabía nada de música, pero el ambiente me obnubiló por completo. Desearía que ese sentimiento perdurara por siempre y sé que, para lograrlo, necesito dejar de odiar a mi padre.

-¿Cómo es ese sentimiento?- pregunté.
-No sé cómo explicarlo, es similar a cuando amamos con tal intensidad que sentimos la necesidad de crear algo a partir de eso. No exactamente crear, sino actuar en consecuencia. Tenía once años, no creo haberlo comprendido en aquel momento. Pero sí sabía que aquella había sido la mejor noche de mi vida y el sentimiento que experimenté, el más fuerte.


Cartas de amor a los muertos,
Ava Dellaira.

miércoles, 22 de julio de 2015

Tú, mi problema. Tú, mi nada.

No sé que es lo que quieres.
Quisiera que tuvieras el valor de decírmelo, porque la escuela acabo y creo que no volveré a verte.
Pasaron tantas cosas desde febrero y justo cuando estoy por olvidarte, apareces.
Alguien te menciona, cruzo miradas contigo, nos dejan solas en algún lugar.
Intenté arreglarlo, lo juro, me atreví a preguntarle a mi madre, fue un malentendido.
Quise arreglarlo esa noche pero preferiste prestarle más atención al teléfono que a mi.
Quería llorar.
Quería que volvieras a abrazarme y a tomarme de la mano.
Quería que te sentaras junto a mí y me hablaras de cualquier tema.
Quería que hasta me hablaras de las chicas con quienes hablabas aunque me muriera de celos.
Quería que volver a leer: "Cuando encuentras a alguien se deja de ver a los demás" viniendo de ti.

Me propuse olvidarte, ya no te buscaba con la mirada, ya no sentía el vacío, ya no sentía los celos.
"Me preguntó por ti" lo arruino todo. La esperanza volvió. Me ilusioné. Me mataste la esperanza.
"Me preguntó por ti" "Me la encontré y me preguntó por ti" "Te estaba mirando" "Es amiga de tu prima"
En las fiestas de la escuela siempre bailas junto a mí, Ana me invita a tu grupo a bailar y me coloca junto a ti, vienes a nuestro grupo y Diana me pone junto a ti, cuando suena una canción lenta y Ana la baila conmigo me miras o bailo con Irma y me miras.

Era el último día, dijeron nuestros nombres y se acabó.
Todos se levantaron y se abrazaron, se tomaban fotos, mis padres llegaron a felicitarme y mis amigos, levanté a la mirada y ahí estabas. Mirándome.
Cruzamos miradas entre toda la gente y nuestros compañeros.
42 días desde esa noche.
Tome coraje de algún lugar y fui hacia ti, con mi madre animándome (sin tener idea).
Con la excusa de una foto, me abrazaste y sonreíste y solo quería volver a febrero.

 Este verano dije que te dejaría atrás, que dejaría los sentimientos enterrados y es entonces cuando hace dos días alguien me dijo "me habló y me preguntó por ti".

¿Qué es lo que quieres de mi? Porque todos me dicen que siga adelante, que no vale la pena, que no te ruegue y no lo voy a hacer, pero ellos no sintieron tu calidez, a ellos no los besaste en la mejilla, con ellos no hablabas hasta la madrugada.

Quisiera que hicieras un esfuerzo por arreglar esto, pero no lo hiciste hace 5 meses, ¿puedo creer que lo harás ahora?

sábado, 18 de julio de 2015

Irnos, por fin irnos.

Va a ser una putada irnos,
por fin irnos.
Pero irnos de a de veras.
Ya no regresar al día siguiente ni al terminar el fin de semana.
Ya no bajarte del auto y despedirte y entrar por esa puerta 10 minutos después de las 7 am.
No llegar con el cabello húmedo y aún arreglándote el uniforme.
No entrar en esa aula ni ver a esos idiotas.
Ya no decir "quiero irme" a los 20 minutos de iniciar la primera clase.
Nunca más sentarte en esas bancas o caminar por esos pasillos.
Nunca más mirar por esas ventanas cuando la clase es insoportable.
Nunca más quejarse de los profesores a los que en el fondo quieres un poco.
Da un poco de miedo no volver nunca a ese lugar.

Me pase tres años deseando que se acabara...y se acabo.
De repente, ya no hay nada.
Y el último día, mientras la profesora decía nuestros nombres y todos aplaudían, solo pensaba: "Lo hice, de verdad, lo hice".
No siento tristeza, no puedo decir que extrañaré a mis compañeros porque la mayoría eran unos idiotas, me reía de sus tonterías pero por mi no volvería a verlos en mi vida. Y no lo digo por ser "mala" pero ellos me hicieron suficientes cosas para toda una vida como para extrañarlos.
Las personas que extrañaré ni siquiera estaban en mi mismo grupo, esas personas que hicieron esos tres años soportables, personas que que me hacen reír todo el tiempo, personas con las que quiero seguir hablando toda mi vida.
Ellos estuvieron conmigo cuando yo ni siquiera estaba ahí para mí.
Por ellos escribí Ellos, Y de repente creo que puedo sentirme infinita, Liz, I (II), I (III) y muchas más.

Son ese tipo de personas que te recargan el corazón con un abrazo, son ese tipo de personas que no quieres soltar jamás aunque sean demasiados simples y desesperantes. Y nunca voy a agradecerles lo suficiente.

Nunca más voy a volver a ese lugar, eso ya terminó para mi, es una etapa más que cerrar.
En agosto vuelvo a empezar y serán otros tres años.
Y ya no tendré a esas personas y las decisiones importantes comienzan.
No sé cual da más miedo.
(Voto por la primera.)

Feliz cumpleaños, te quiero.

Sé que ahora estás bien, sé que estás con tus hermanos y tus padres, que estás bailando y riéndote, ahí en algún lugar, sé que ya no te duele.
Sé que ya no tienes miedo.
Todos te extrañamos.
Feliz cumpleaños.
Te quiero.

No puedes salvarlas.

22/05/2015

Nunca que te imaginas que se irán.
Pero lo hacen.
Siempre lo has sabido. 
Pero no lo esperas.
Imaginas que será en mucho tiempo.
Pero de repente pasa.
Porque siempre han estado ahí, desde que naces.
Y tal vez no era tan apegada, pero le quiero. 
Y siempre voy a recordar como bailaba en las fiestas, sin vergüenza. 
Nunca supe su historia, porque era suya, pero sé que no fue fácil criar a 4 hijos sola.
Voy a recordar su simpatía y como todo siempre tenía alguna historia que contar.
Me dijeron que no sería mi culpa si alguna vez no recordaba mi rostro. 
Voy a recordarla vivaz y riéndose con todos.
Voy a recordar cuando me hecho agua bendita porque no paraba de llorar. (Joder, puta madre).
Voy a recordar como siempre decía que ella podía, que no necesitaba ayuda.
No voy a recordarla cuando comenzó a dejarse ir. 
No quiero recordar el mensaje diciendo que ya no se puede hacer nada.
No voy a recordar nada de eso. 
No quiero.
Solo sé que voy a extrañarla, porque aunque haya desperdiciado todas esas veces, ella siempre estuvo ahí.
...
21/06/2015

Tiempo después de escribir eso, no creí que que esa mujer fuerte y alegre...se vería así, nunca creí que los huesos me asustaran tanto, nunca creí que su piel se volvería tan fría.
La última noche que le vi, le besé la frente y pensé en cuanto le quería y en que debería decírselo. No lo hice. 
Sé que lo sabía.
Hace una semana podría haber dicho que estaba mejorando, podría haber fingido que estaba bien. 
Joder.
Disfrutamos la carretera, la brisa, el sol corriendo por la piel, las anécdotas, las risas, los reencuentros.
Fue como si nunca hubiera pasado nada.
Un mes antes estaba a mi lado, comiendo y disfrutando del silencio.
Semanas después, no podía hacerlo. 
Y tengo enojo y tristeza y nunca pensé ver a mi padre en ese estado. 
Duele ver derrumbarse a tus héroes. 
Y cuando llegué a esa casa, estaba todo mal. Es como algo pesado en el pecho, algo que te impide sentirte feliz.
Cuando me despedí, sentí su frente fría contra mis labios. Joder, el día anterior el contacto era tibio.
Solo fueron unas cuantas horas.

Una parte de mi está aliviada, porque no sufre más. Porque sé que está en su paraíso, porque aunque no sea muy religiosa creo que ella está en un buen lugar, en su cielo.
Pero eso no impide que odie despedirme, no impide que odie ver el ataúd, no impide que odie ver a todos llorar, no impide que odie cubrirle de flores y después de tierra y demás.

No puedes salvar a las personas, solo puedes amarlas.

El mundo sigue mientras tú solo quieres que pare. Los pájaros aún cantan mientras tú sales de la funeraria con ojeras. El sol aún brilla mientras tú estás parada viendo como bajan el ataúd. El mundo sigue. Es lo peor, no te da tiempo de recuperarte.

Voy a recordarla diciendo "¡Hueeeep!" cuando veía a alguien conocido en la calle, con la música siempre por dentro. Como podía hablar con todo el mundo porque era muy simpática y alegre.
Siempre le encontraba el lado bueno a todo.

Voy a recordarla así.
Lo merece.

"Adiós no es para siempre, adiós no es el final. Solo significa que te echaré de menos, hasta que te vuelva a encontrar." 
-Para todos aquellos que se nos adelantaron. 


Nunca lo dije en voz alta: Te quiero. (18/07/38 - 17/06/15)

lunes, 13 de julio de 2015

Dos años.

Y aún te extrañamos, Cory. Dos años y dueles como el primer día.
 Te amamos. Siempre lo haremos.
Siempre en nuestros corazones, mi niño.
Gracias por todo.

domingo, 12 de julio de 2015

"El amor te hace hacer tonterías".

Nunca cambies por un amor. No vale la pena. Créeme.

Los amores vienen y van fácilmente, no porque la gente diga que "es el último barco" tienes que hacer lo que sea porque se quede contigo.
¿Y si te trata mal? ¿Y si solo te quiere por tu dinero? ¿Y si solo está pasando el rato y jugando con tu corazón? ¿Y si se ríe con sus amigos a tus espaldas?
¿Realmente vale la pena alejarse de tu familia, que estuvo contigo toda tu vida y te apoyo, por una persona que conoces hace solo unos meses? ¿Vale la pena tener problemas en el trabajo? ¿Vale la pena hacer llorar a tus padres?
¿Vale la pena que tus sobrinos más pequeños digan: "ya no me quiere"? ¿Vale la pena dejar a tu madre sola en su cumpleaños o en el día de las madres? ¿O a tu padre? ¿Vale la pena no comer o no dormir? ¿Realmente?

No lo creo. Yo no lo creo.
Y tampoco creo que sea amor. No puedo creerlo.
"El amor te hace hacer tonterías" es solo una excusa.

domingo, 21 de junio de 2015

17/06/15.

Nos vemos, no digo adiós, porque te volveré a ver. 
Lo siento, por desperdiciar el tiempo.
Lo siento, por nunca decir suficientes veces que te quiero.
Perdón.
Perdón.
Dios, puta madre, te quiero.
Te quiero.
Te quiero.






Te quiero.

miércoles, 3 de junio de 2015

(...) a no buscarte.

Y paseo por las calles
de nuevo
con el corazón en mano
con las suturas descosidas
y con los zapatos en la otra

Me balanceo
como las olas
que chocan con la arena
a mi lado
y puta madre
quiero abrazarte

Tengo que comenzar
de nuevo
a olvidar
todo
a desacostumbrarme
de ti

Tengo que comenzar
de nuevo
a no buscarte
con la mirada
con el tacto
joder

No importa
me repito
no dolerá
me repito
pero lo hace
puta madre
lo hace

Son letras amargas
letras sin llanto
por que el llanto
ese llanto
lo aguante mientras hablaba contigo
mientras te ibas
y mi mejilla se quedaba sin tu beso

Es momento de avanzar
me digo
mientras escucho 102
y Matt dice exactamente todo
con su voz cruda y su guitarra
cantando sobre su corazón roto

Un poco como el mío
un poco como todo entre nosotros

sábado, 30 de mayo de 2015

Hoy.

Hoy.
Horas.
Minutos.
Segundos.
Hoy.
Creo en mi.
Y a la vez quiero irme a llorar a un rincón.
Hoy.
Horas.
Minutos.
Segundos.
Hoy.
Ahora.

miércoles, 27 de mayo de 2015

Tres.

Y te pasas tres años deseando que se acabe y entonces...se acaba. 
Y de repente sabes que vas a extrañar las risas y las idioteces.
Y sabes que no los verás tan a menudo.
Y ahora me paso todo el tiempo riendo y aprovechando.
Porque en tres días todo se hace más real y no doy más con los nervios.
Mi madre me ha dicho que voy a extrañar esos tiempos.
Y voy a hacerlo. Claro que sí, a pesar de todo.

No hay mejores tiempos que estos. Si rebusco entre los malos momentos y las caídas, voy a encontrar lo bueno. Voy a encontrar las risas y los buenos tiempos, justo detrás de los pensamientos malos y las ansias de que todo acabara.
Ahí están, aunque los pierda de vista a menudo.

Aún no se acaba, pero casi, quedan 4 semanas y todo será un "nos volveremos a ver".
La mayoría de mi generación me cae mal pero no se puede evitar extrañar todo eso, aunque diga que nunca voy a volver a pensar en esos tres putos años, sé que lo haré.
Algún día necesitaré recuerdos de los cuales reírme y tendré estos. 
Así como los hice con los pasados 6 años, ahora me río de ellos y la mayoría ya no duelen. 
Elegí reírme y dejar ir lo malo de esos años. 

Y te dicen que algún día se acabará.
Y se acaba.
"Nos vemos" "Adiós".
Y comienzas de nuevo.

miércoles, 20 de mayo de 2015

Forever Young - Alphaville.

Una parte de mi te extraña, ¿sabes? Te conozco desde los 4 años, te he querido y me has caído mal demasiadas veces que no puedo recordarlas todas.
Extraño las tardes fuera de mi casa.
Extraño las pláticas secretas.
Extraño tenerte sentada frente a mi 7 horas los cinco días de la semana.
Extraño tu brazo sobre mi hombro y el mío en tu cintura.
Extraño las caídas y las carcajadas, los insultos y los te quiero.

Extraño subir al carro y verte a mi lado o en el asiento trasero.
Extraño las tardes-noches de películas solas en mi casa, imaginándonos viviendo juntas y haciendo todo eso que soñábamos.
Extraño tus peleas con los demás y conmigo.
Extraño compartir las barritas de fresa que siempre comprábamos.
Extraño poder contarte todo.
Extraño que tú me cuentes todo.
Extraño tus explicaciones de algún tema y después confundirte.
Extraño tus mensajes a cualquier hora y tus llamadas.
Extraño ese primer cigarro y todos los demás.
Extraño cantar Forever Young de Alphaville a gritos en mi cama.

Extraño ese verano en que cambió todo.
Las mentiras, las experiencias que querías vivir, las risas y la emoción, la estupidez, la cercanía.
Ni siquiera te vi cuando te fuiste. Recuerdo que la despedida estaba ahí, escondida en alguna parte, cuando viniste a mi casa esa tarde cuando se descubrió todo. Quisiera decirte que fue una tontería haberte apresurado. Que tal vez seguirías aquí, pero eso significa que yo no hubiera cambiado y yo necesitaba cambiar.
Tu último día aquí me enviaste un mensaje, prometiendo escribir, venir cada que pudieras, nunca olvidarme. Y prometí lo mismo.
Y al principio lo hice, pero tú no lo hacías. Y el tiempo y la distancia hicieron lo que siempre hacen.

Y cuando venías, nunca nos veíamos o yo estaba herida por tus faltas. Y cuando comencé a olvidarlas, tú regresabas y me cambiabas. Vale, sí, que me dan celos, porque yo he estado ahí desde el principio y ella no. (perdón por eso). Y me duele solo haberte visto dos veces a solas desde ese Agosto.

Cambiaste, cambie. Le pregunté a mi madre sobre eso y ella contestó que pasó la vida.

Te extraño.
Extraño las personas que solíamos ser.
Pero sé que las que somos ahora son mejores.

martes, 19 de mayo de 2015

Evolución.

Es bueno alejarse.
Es bueno trabajar en ti y reconstruirte.
Ver las cosas de distinta manera y no tener miedo de ser quien eres, aceptarte y quererte.
No tener miedo de usar la ropa que te gusta, salir a donde quieres porque eres joven y sientes que puedes comerte el mundo (de buena manera). Reírte sin importarte nada, reírte de ti misma, sobretodo.
Creer que vas a poder hacer todo, aunque claro que vas a dudar, pero al final tienes que creer que lo vas a lograr y claro que lo harás. Creer las cosas buenas que te dicen de ti las personas que te conocen. Las cosas malas que te digan los demás puedes mandarlas al carajo. Ahí pertenecen. Y ahí se tienen que quedar.

Todos cambiamos, porque es parte de crecer, cambiamos con nuestro entorno, las cosas que pasan y con las personas de las que estamos rodeados. No somos los mismos estando solos o con nuestros amigos. Las cosas que nos gustaban el año pasado ya no lo hacen más y las cosas que no te gustaban ahora lo hacen y es normal. Las personas que eran tus mejores amigos hoy son extraños que ni siquiera voltean a mirarte. Las personas cambian y a veces olvidan decírselo a los demás. 

Evolucionamos.
De nosotros depende si para bien o mal.
En estos momentos de mi vida estoy eligiendo para bien, estoy cambiando por mi, porque quiero reírme sin miedo a nada y usar la ropa que me gusta sin importarme una mierda los demás. Porque es mi último año y me pongo nerviosa y sentimental. Porque tengo que presentarme a un examen de admisión en 10 días y tengo que creer que lo lograré.
Porque quiero creer en mi.
Porque lo estoy intentando, porque creo que lo que importa es el esfuerzo.




domingo, 19 de abril de 2015

J.

 Hasta que no hayas amado a un animal, una parte de tu alma permanecerá dormida.

Espero que estés bien, Jack. 
Te extrañaré, pequeño fastidioso.

martes, 7 de abril de 2015

Y por eso.

Me devolvió el libro, aquel que me pidió un día de Noviembre, tenia un par de esquinas de la portada doblada y olía a su perfume.

Lo tome entre mis manos y quise apretarlo contra mi pecho para retener su presencia, para hacerla parte de mi.
Lo confieso ahora, tuve ese libro por un año antes de hablarle sobre él y nunca lo leí, nunca lo abrí, nunca me adentré en él hasta tiempo después de que lo devolvió.

Ahora lo hago, ahora veo un pequeño dibujo escondido, un pequeño retrato en su hogar entre las páginas 176 y 177.
No creo que lo haya dejado ahí a propósito,  quiero creer que las letras le dieron inspiración y decidió crear magia con sus dedos y su pluma.

No se lo devolví, no lo mencione. Una parte de mi quiso quedarse con una parte suya aunque no le pertenezca. Una parte perdida que tal vez ya no recuerde.

Me devolvió ese pequeño mundo un día de Enero, ahora decidí crear un poco de mi magia mientras colocó una hoja doblada a la mitad (con un horrible dibujo que Néstor nos hizo hacer en clases de artes) entre la 255 y 256.

Quiero seguir recordándole en un par de años, cuando vea mis viejos libros y pase las hojas empolvadas rápidamente.

Y siento tratar de escribir como tú Min, siento querer describir cada objeto y cada momento que pasabas con Ed, Al, Joan o Laura y Jordan como lo hacías tú.
(Estoy descubriendo que estoy un poco enamorada de ti, aunque a veces quiera ponerte cinta en la boca.)

Voy a dejar su pequeño trozo entre esas páginas, (como Min dejo todos tus recuerdos en esa caja fuera de tu casa, Ed) para recordar que en algún lugar del mundo existe una persona así.

Y fue por eso, E. (Lo de la inicial fue una coincidencia, Ed, tú nunca apreciarías éstas letras, y yo nunca te escribiria y por eso fue que rompieron).
(Lo siento, tuve que hacerlo, maldito libro).

A todo eso.

Le besé, sabía a manzana y canela, a sueños e ilusiones, a risas en el parque y a canciones tristes. Sabía a todas esas noches al teléfono hablando en susurros o escribiendo palabras en madrugada que salían temblorosas e incoherentes como pueden salir a las 4 am.
Sabía a esas tardes con el cielo pintado de rosa, naranja o azul. A brisas de pensamientos felices y de claridad. Como cuando te sientes feliz con la vida y sin miedos.
A tiempos mejores, a fotografías con sonrisas verdaderas, a confianza y cosquillas.
Me abrazo, se sentía como esos viajes en carretera con el atardecer persiguiéndonos y con Bon Jovi en el radio.
A los libros con listones regalados de I haciendo el trabajo de separadores y a discos de Fun o P!nk en el estéreo en invierno. A las tardes con mi madre haciendo cupcakes, y probando el turrón o loquesea a escondidas.
Se sentía como volver a un lugar donde alguna vez se fue feliz, como ir a la playa en verano y correr riendo al mar.
Como reír con tus amigos a carcajadas hasta que les duele el estómago, a él último día de clases o cuando se acaba una fiesta de la que no quieres irte y todos los que amas están en ella.
Como acabar un libro en domingo y llorar, como estar de vacaciones y sentir que puedes hacer todo. Como ver a Phoebe siendo adorable, a Joey tratando de convencerse de que sólo tiene un pequeño crush con Rachel, a Mónica y Chandler con sus pequeños gemelos saliendo ese apartamento o a Rachel y Ross en el nacimiento de Emma. A ser feliz sin miedo.
A todo eso.

domingo, 22 de marzo de 2015

It's been an honor.



Eso es todo. 

A todos alguna vez nos han dicho que todo acaba, que nada es para siempre y que el mundo va a seguir como si nada, aunque nosotros estemos en el suelo con una herida. No importa cuán lastimados estemos y cuanto nos duela, el mundo va a seguir. Las personas solo van a darte una mirada y seguirán su camino. Pocos van a comprender lo que es estar mirando el tiempo pasar con la herida abierta y los recuerdos libres.

                                                                    Siempre me han dicho es solo una serie, es una serie para gays, no seas ridícula, pero es que ellos no entienden. No entienden que esa serie hizo que no me sintiera tan sola y que me sacara una sonrisa cuando llegaba a casa por la noche, no entienden las risas que me provocaban verlos, escuchar sus canciones, ver los capítulos, fangirlear, morirme de la espera por el próximo capítulo. No lo hacen. 




Cuando supe que Glee terminaba, solo quería detener el tiempo. Sabía que era algo que no se podía evitar pero tenía la esperanza de que esta fuera la excepción. No estaba ni estoy lista para que ellos pasen a hacer otra serie más u otros personajes más, ellos me ayudaron, hicieron que viera que es normal amar sin importar nada, que todos éramos hermosos a pesar del físico, que todos tenemos heridas y momentos difíciles, pero que van a pasar. Que vamos a enfrentarlos y a aprender de ellos. 
Que tenemos que tener coraje. 

Ellos me marcaron, el profesor que los impulsó a soñar en ese salón, aunque él mismo no hubiera cumplido los suyos. Que les enseño que tenían que seguirlos. Que los apoyo. 
Todos ellos. 





Y no tengo palabras para agradecerles. No voy a decirles adiós, porque siempre estarán ahí cuando los necesite. Por todas esas canciones, las sonrisas, las risas, los momentos, las lecciones, los problemas que superaron, la aceptación, el amor, por todo. 




Gracias, chicos. Ha sido un honor. 








miércoles, 18 de marzo de 2015

Vuelvo a mis cosas sin importancia, incoherentes, pero peor.

Ya no recuerdo como escribir, ya no recuerdo como hacer que mis letras lloren si estoy triste o reír si estoy feliz. Ya no sé hacer para que mis letras hagan sentir algo. Tal vez me he perdido.
Ahora solo paso tardes buscando cosas para cambiar y no ser así. Porque esto me duele desde los 10 años y me jode porque veo a personas como yo que me parecen hermosas por ser como son y no por su físico. Y ruego para que no se sientan como yo me siento la mayor parte del tiempo.

Después están estas personas que quiero dejar de ver porque van y se apropian del lugar donde iba a dejar de pensar en todo eso, lo contaminan y lo peor de todo es que ahora solo quiero evitar ir ahí, como siempre me pasa con los lugares que antes me hacían feliz, hasta que algo malo pasa en ese lugar y automáticamente nunca quiero volver de nuevo ni pensar en él. Hacen que solo quiera quedarme en casa y leer eso que hace que me hace ignorar el mundo. Y esas personas son mis amigas o personas con las que tengo que convivir porque la escuela me obliga y porque todas las personas que realmente me caen bien están en otro grupo...Se ve feo si lo escribo así. Lo siento.

No sé que pasó conmigo, no sé a donde ir y solo sé que estos días solo soporto hablar con tres dos personas. Y no voy a hablar sobre la tercera que había porque...no. Porque no quiero volver a hacer eso de aferrarme e ilusionarme con alguien tan rápido y que después me borre de su vida dos días después. Quiero cambiar, quiero ver resultados, quiero poder ser un poquito como esas personas hermosas de las que he hablado en el primer párrafo, quiero saber que paso conmigo y porque deje de ser tan agradable. Quiero no volver ahí, pero eso significa volver a otro lugar no feliz y tampoco quiero ir ahí.

Quisiera volver a escribir como antes y poder sentir algo, pero ahora todo lo que escribo es una mierda y no me gusta. Vine aquí a escribir algo que valiera la pena y solo salieron estas letras quejumbrosas.

Me fui
mucho tiempo,
aún
me seguiré yendo,
aún
no vuelvo del todo.

Fui a buscar mis letras
mi tinta
y aún
aún
no la he encontrado
no del todo

Si alguien
la ve por ahí:
golpea
a esa hija de puta
y dile que vuelva.

Iba a dejar de decir malas palabras porque me han dicho que soy una "señorita" pero no puedo evitarlo, es el chico rebelde y maldito en mí. 

viernes, 20 de febrero de 2015

Good old days.

Querido amigo: 

Estos serán los buenos viejos tiempos. 

Con amor, 
S.

lunes, 9 de febrero de 2015

Sin vista al futuro. (II)

No tengo idea de lo que estoy haciendo. Miro al rededor y todos parecen saber a donde se dirigen, o al menos lo que quieren. Yo estoy perdido. - Finn Hudson. 

Supongo que eso es algo que él y yo tenemos en común. No sabemos a donde nos dirigimos. Y estoy rodeada de gente que me pregunta constantemente a donde voy a ir después de esto, que opción es la que me conviene mejor, las capacitaciones que hay, las clases. Todo.

No tengo idea de lo que voy a hacer, siempre he tenido un plan. Uno sencillo que se adapta a la realidad. Pero no son mis sueños, no es lo que hace que me brillen los ojos. Mi madre me dice que estudie algo que me deje buen ingreso económico, algo que me ayude a darle un futuro a mis hijos más adelante, algo que sea realista, en pocas palabras.

Es lo seguro, lo conocido a lo que me orillan.
Estás semanas la psicologa de mi escuela ha jodido hasta el cansancio sobre a donde iremos después de este año. Nos hablo de las diferentes escuelas. Han ido a darnos pláticas, cada escuela diciendo sutilmente que son mejor que otra, lo malo de esto, es que son buenas escuelas pero no tengo el ingreso económico para permitirme pagar casi $10, 000 al mes. Y ni hablar del ambiente de esos colegios.

Hace días vi una pregunta, ¿qué tan a menudo piensas en el futuro? Más del de que debería, pienso en el constantemente y me aterroriza. Me da pánico. Hace que quiera ir a vomitar y llorar.

No pensé que este momento llegaría tan pronto, no pensé que llegaría hasta aquí, sinceramente.

Y no hablemos de mis sueños, que sueño con hacer algo grande. Con irme de aquí y rehacer mi vida. Pero sé que no es fácil, sé que realizar lo que quiero llevará tiempo...sé que puede que nunca lo haga.

Y ya lo he dicho muchas veces en diferentes post, no quiero despertarme en 60 años y darme cuenta de que desperdicie mi vida haciendo algo que si, me daba buen ingreso o me dio una "buena vida" pero no hizo que mis ojos brillaran.

Y también sé que el post de Fight Club es cierto.

Solo quiero poder ver a mi futuro y ver algo más que niebla.

sábado, 10 de enero de 2015

Y te das cuenta, el tiempo se va demasiado rápido.

Y entonces, estás recostada en tu cama una tarde de Enero, matando el tiempo y contestando publicaciones en algún grupo de uno de los muchos fandoms, escribes tu respuesta y la re lees, y entonces pasa. 
Ves ese número.
Y te das cuenta cuenta de que el tiempo se va como agua entre tus dedos. De que nunca te imaginaste que llegarías hasta aquí.  De que crecer...es inevitable.

De que algún día tendrás la edad de tus hermanos mayores o de tus padres.  De que vas a salir de secundaria y tal vez no vuelvas ver a alguno de tus amigos.
Te das cuenta de que sólo tienes una vida. Y que el reloj avanza muy rápido y que no puedes hacer nada para detenerlo. De que las personas que quieres algún día van a irse de este mundo y te dejaran con un vacío.  Y que no puedes hacer nada.
Nada.
Hay una parte de mi que tiene pánico a todo eso escrito arriba, que tiene pánico a crecer y de enfrentarse a cosas mucho más grandes de las que ya me enfrentó ahora. Y no creo ser la única, quiero creer que mis padres también tuvieron ese pánico, quiero creer que voy a disfrutar los años que vienen y hacer lo que me gusta, porque la vida se va rápido. Y no quiero que lo haga.